EL BLDSC (British Library Document Supply Centre) de Boston Spa, York, está haciendo las pruebas beta (con un grupo reducido de usuarios) de su nuevo software de petición de documentos –fotocopias y préstamo de libros–, ARTTel
(Automatic request transmission telecommunications).
Es mucho más fácil de utilizar, con más mensajes explicativos, correo electrónico usuario-Bldsc, control de la situación de las peticiones, etc.
Se prevé su disponibilidad para el público en primavera de 1993.
Bldsc. Tel.: +44-937-54 60 60; fax: 54 63 33
En 1975, el Edificio Urquhart se convierte en la primera estructura construida especialmente para el sitio de Boston Spa y lleva el nombre de Donald Urquhart, el primer Director de la entonces denominada National Lending Library for Science and Technology.
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Esta información se publicó en la revista Information World en Español (IWE), n. 10, diciembre de 1992 – enero de 1993, p. 20.
Información añadida en 2025
Remodelación de las instalaciones de la British Library en Boston Spa, York, a cargo de Buro Happold
Escondido en el corazón del Reino Unido se encuentra un tesoro para la palabra escrita. Ubicado en una antigua fábrica de municiones de la Segunda Guerra Mundial, el repositorio de Boston Spa alberga más del 70% del catálogo de la British Libray en amplios almacenes, algunos de los cuales llevan funcionando desde la década de 1970.
Este proyecto supondrá la renovación de un gran almacén de colecciones de varias plantas de los 70 y un edificio de trabajo para el personal, que lleva el nombre de su fundador, Donald John Urquhart (1904-1994) (en la foto). El objetivo es mejorar la eficiencia energética y crear un entorno de trabajo moderno diseñado para mejorar la salud y el bienestar del personal. Además, se creará un nuevo almacén automatizado que utiliza climatización pasiva en lugar de los métodos tradicionales de alto consumo energético para preservar los materiales en su interior.
Desafío
Este proyecto presentó diversos desafíos, entre ellos la modernización del edificio Urquhart. Con ocho plantas de 4000 m² cada una, este antiguo almacén de alta tecnología necesita ser adaptado para el funcionamiento moderno de la Biblioteca.
Las condiciones ambientales son un factor clave. La combinación de paredes profundas que crean un interior oscuro, ventanas de un solo acristalamiento que dejan pasar las corrientes de aire y sistemas de climatización de la década de 1970 no propician condiciones de trabajo ideales, y su consumo energético es extremadamente elevado.
Con unas dimensiones de 80 m x 40 m y una altura de 28 m, el nuevo almacén automatizado albergará nueve pasillos de grúas. La actual combinación de equipos mecánicos y montones de papel que van del suelo al techo presenta un riesgo de incendio considerable. Las medidas de mitigación tradicionales, como los rociadores, no podían utilizarse debido a la densidad del material almacenado y serían igualmente perjudiciales para la colección que allí se guarda, por lo que se tuvo que buscar una solución alternativa. Además, la eficiencia energética es una consideración primordial, ya que la British Library deseaba adoptar un enfoque pasivo para la climatización.
Los geólogos ingenieros han desempeñado un papel fundamental en el proyecto, analizando la viabilidad de utilizar sistemas de energía geotérmica. Inicialmente, el equipo realizó un estudio de viabilidad al inicio del proceso para determinar si la geología y la hidrogeología serían adecuadas para dicho sistema, centrándose en el acuífero de piedra caliza subterráneo. A partir de esto, se colaboró con la Agencia de Medio Ambiente para obtener un permiso para investigar un recurso de agua subterránea y, posteriormente, organizar la perforación y análisis de una serie de pozos en todo el sitio.
Los resultados hasta la fecha han sido muy favorables y, si el sistema avanza a la siguiente etapa, intentaremos demostrar a la Agencia de Medio Ambiente que el sistema de energía geotérmica no afectará negativamente al acuífero, ni a otros cursos de agua ni a los pozos de la zona. El objetivo final, si el sistema avanza, es ayudar a la BL con la solicitud de una licencia de extracción y un permiso de vertido para permitir la implementación del sistema.
Una estrategia coherente y zonificada reemplazará el uso mixto del espacio en el renovado edificio Urquhart. Los almacenes para el material de recolección se ubicarán en las zonas centrales y oscuras, y las oficinas se ubicarán alrededor del perímetro para que el personal pueda disfrutar de la luz natural y las vistas al exterior. Se ha realizados un análisis de la luz natural para diseñar la fachada, determinar qué zonas son las más iluminadas para la ocupación y la distancia a la que se debe ampliar el almacenamiento.
También modelamos el confort térmico y determinamos que una solución de modo mixto sería la más eficaz. Los sistemas mecánicos proporcionarán aire fresco al edificio durante todo el año y recuperarán el calor, lo que se traducirá en un entorno de trabajo cómodo para el personal y una estrategia de eficiencia energética. Además, se emplearán diversas soluciones pasivas para reducir la ganancia de calor y minimizar la refrigeración mecánica necesaria, como la apertura de lamas en la fachada y el mantenimiento de la estructura de hormigón existente.
Para mitigar el riesgo de incendio en el nuevo almacén, se planea mantener el ambiente con un bajo nivel de oxígeno, lo que reduce la posibilidad de que se inicie un incendio. Esto se logrará bombeando nitrógeno al edificio para reducir los niveles de oxígeno a poco menos del 15%. En este entorno, solo operarán grúas y robots, con restricciones sobre el tiempo que las personas que realizan mantenimiento pueden permanecer dentro del espacio. Aunque tradicionalmente el almacenamiento y el cuidado a largo plazo de los materiales se han llevado a cabo en condiciones altamente controladas y con un alto consumo energético, se ha estado explorando hasta qué punto pueden desplazarse en el nuevo espacio de almacenamiento sin afectar negativamente a la colección. Descubrimos que la temperatura puede variar con seguridad desde tan solo 10 °C en invierno hasta 20 °C en verano, siempre que el cambio sea lento para que el papel del interior tenga tiempo de adaptarse. Permitir que la temperatura fluctúe de esta manera significa que la humedad relativa se mantiene.
Se espera que la remodelación esté lista en 2025.