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Manual de Comunicación y Divulgación Científica

Manual de Comunicación y Divulgación Científica
José Ramos Vivas

Editorial: Almuzara
ISBN: 9788418346125
Núm. páginas: 352
Formato: 14,5 x 22 cm
Fecha: febrero 2021

PRÓLOGO

“Los investigadores deben velar por que sus actividades de investigación se den a conocer a la sociedad en general, de forma que puedan ser comprendidas por los no especialistas y se mejore así la comprensión de la ciencia por parte del público. El compromiso directo con la sociedad ayudará a que los investigadores comprendan mejor el interés de ésta por las prioridades científicas y tecnológicas así como sus preocupaciones.

Carta Europea del Investigador (2005/251/CE),
publicada en el Diario Oficial de la Unión Europea L75,
el 22 de marzo de 2005.

El conocimiento científico que necesitan los ciudadanos no es aquel que les puede permitir realizar complicadas operaciones matemáticas, o reparar un ordenador, o realizar un experimento con sustancias químicas, sino aquel que les permite conocer y extraer de su entorno la información necesaria, para tomar mejores decisiones y para solucionar más rápido y mejor los problemas cotidianos.

A nivel personal, podemos utilizar ese conocimiento científico para superar problemas en nuestro día a día, pero también lo necesitamos para la comprensión y la búsqueda de soluciones a los grandes problemas contemporáneos a los que se enfrenta nuestra sociedad. Los científicos pueden ayudar a mejorar el conocimiento científico de la población, porque ellos ocupan una posición privilegiada a la hora de ayudar a que los ciudadanos comprendan y afronten esos grandes problemas.

La comunicación de la ciencia es un elemento vital para hacer que ésta sea realmente útil a la sociedad. Cuando hablamos de comunicación de la ciencia hablamos también de una comunicación dirigida a personas no expertas en ciencia. Es decir, esta comunicación no solo se refiere a la comunicación entre científicos —que también—, sino sobre todo a la comunicación de los científicos con otros agentes sociales interesados en que la sociedad funcione, como políticos, empresarios, colectivos de profesionales muy diversos y finalmente, con la gente de la calle.

Mi objetivo al escribir este libro ha sido el de animar a los jóvenes científicos —y no tan jóvenes— a comunicar la ciencia al público, a esa «gente de la calle». Animarles y demostrarles que comunicar la ciencia es beneficioso para la sociedad y para ellos mismos. Y aviso que no es tarea fácil. Se requiere tiempo, esfuerzo, práctica, disponibilidad…”