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El mundo de la información al alcance de los ciegos

Por Evelio Montes López

En el número 18 (octubre 1993), pág. 12, presentamos la máquina lectora para ciegos instalada en la Biblioteca de Letras de la Universitat Autònoma de Barcelona:
https://www.scimagoepi.com/la-universitat-autonoma-de-barcelona-instala-una-maquina-lectora

A comienzos de 1994, la prensa diaria (El País, 9 de febrero) se hizo eco de la comercialización de un nuevo modelo de máquina lectora para ciegos: la Reading Edge (en la foto), lectora de sexta generación, de Xerox Imaging Systems, firma que ya está poniendo a punto prototipos de la séptima generación.

La Organización Nacional de Ciegos Españoles (ONCE) cuenta con su propio centro de I+D, la Unidad Tiflotécnica (UTT)*, que se dedica, entre otras cosas, a evaluar rigurosamente todas las ayudas técnicas (aparatos que facilitan la autonomía de las personas ciegas o deficientes visuales) que aparecen en el mercado.

* Del griego tyflós, ciego.

Maquina lectora Reading Edge

La Reading Edge obtuvo una valoración muy positiva y la ONCE suscribió con Xerox un acuerdo de distribución en España: los afiliados a la ONCE pueden adquirir la máquina a precio de coste (menos de 700.000 pesetas), con préstamos de bajo interés o subvenciones a fondo perdido que concede la Organización.

Reading Edge es una máquina compacta y de reducidas dimensiones. Su peso, 9 kilos, la hace fácil de transportar. En un solo aparato integra todos los elementos básicos de lectura: escáner, software de reconocimiento óptico de caracteres y sintetizador de voz. Lee con voz sintetizada cualquier documento impreso, con el volumen, entonación y velocidad que el usuario desee. Puede hacerlo en siete idiomas (español, inglés, francés, alemán, italiano, noruego y sueco), utilizando la correspondiente tarjeta de memoria insertable, del tamaño de una tarjeta de crédito.

Edita textos en braille (el código de lectoescritura braille es esencial para la autonomía personal de los ciegos), y los imprime si se conecta a una impresora braille. Los textos leídos y almacenados en memoria pueden conservarse acoplando a la máquina un magnetófono de cassette, o transfiriéndolos a la memoria de un ordenador personal.

Esta máquina se dirige preferentemente a usuarios que no trabajen con ordenadores personales, y es muy fácil de manejar: todas las teclas están dotadas de voz, de modo que informan automáticamente al usuario de su función. La colocación de los documentos en el escáner es también nuy sencilla, tanto si se trata de hojas sueltas, como de revistas o libros. No hay que preocuparse de la orientación de la página: la máquina detecta si el documento tiene varias columnas y las lee en orden, descartando automáticamente los gráficos e ilustraciones.

La aplicación de tecnologías avanzadas de la información a los servicios destinados a las personas con discapacidad visual se está llevando a cabo también en el campo de las bibliotecas para ciegos. La ONCE está terminando la automatización de su Biblioteca Central, un ambicioso proyecto realizado por la firma Chemdata Ibérica, en el que se combinan el programa de gestión bibliotecaria Bibliotex, y un complejo mecanismo de robótica que efectúa de forma automática todas las transacciones con el depósito de libros. Cuando el proceso esté concluido, los lectores de IWE serán los primeros en conocer el sistema con todo detalle.

Evelio Montes López Francisco J. Martínez CalvoEvelio Montes López (izquierda), jefe de Servicio de Documentación; y Francisco J. Martínez Calvo (derecha), jefe de la Biblioteca Central.
Organización Nacional de Ciegos Españoles (ONCE), Madrid.

Proyecto Exlib
Por otra parte, la ONCE acogió los días 25 y 26 de noviembre de 1994 un seminario del consorcio Exlib (Expansion of European Library Systems for the Visually Disadvantaged). Exlib es un proyecto parcialmente financiado por el Programa de Bibliotecas de la Dirección General XIII de la Comisión Europea, que se puso en marcha en enero de 1993. Pretende ir más allá de los conceptos tradicionales de materiales bibliográficos y bibliotecas para ciegos, para lograr que el usuario ciego o deficiente visual pueda acceder a los fondos bibliográficos de las bibliotecas europeas, seleccionar la información que le interesa y disponer de ella en el formato que mejor le convenga. La utilización, cada vez más extendida, de catálogos de acceso público online (opacs), y de soportes documentales digitalizados, junto con las posibilidades abiertas por las autopistas de la información, pueden hacer que los objetivos que persigue Exlib sean pronto una realidad. Las conclusiones y recomendaciones del Grupo de Usuarios Expertos de Exlib se darán a conocer a finales de 1994.

Centro Bibliográfico y Cultural de la ONCE.
Calle La Coruña, 18. 28020 Madrid.
Tel.: +34-1-571 12 36; fax: 571 59 80

Esta información se publicó en la revista Information World en Español (IWE), n. 30, diciembre de 1994-enero de 1995, pp. 22-23.